Una joven de de Tucúman fue a pescar con su hermano a la ciudad de Santa Rosa de Leales. Allí, en medio de la actividad, se encontró con dos animales a la vera del río. La muchacha pensó que eran gatitos, que estaban amamantándose de su madre fallecida. La chica no lo dudó, se los llevó a su casa y descubrió la verdad.
Florencia fue a pescar como siempre junto a su hermano a la ciudad de Leales, cuando vio algo que la impacto. Dos animalitos estaban tomando leche de su madre fallecida, y eso le tocó el corazón. La joven no dudo, y se lo llevó a su casa, poniéndoles de nombre Dani y Tito. A los pocos días, Dani murió y solo quedó Tito.
Tito se convirtió en su fiel compañero, y se comportó como todo un gato normal. Pero la chica jamás sospechó, de que su amigo no era lo que ella esperaba. Luego de visitar varias veterinarias, para que operaran su patita, llamó a la Fundación Argentina de Rescate Animal, y se enteró la verdad. El felino era en realidad un puma del tipo jagouraundi.
La Fundación publicó en su Facebook la recuperación del animal y expresó: “El equipo de FARA recibió un llamado, y fue a buscar este felino, este jaguarundi fue entregado por una vecina de Tucumán para ser tratado por especialistas y reincertado en su hábitat, este mismo se encontraría con una fisura en su pata trasera, pero ya se encuentra en la reserva para su atención especializada por un equipo de profesionales”.
Además, agregaron: “Queremos agradecer a la gente que entregó al animalito, y queremos hacer llegar el mensaje de que estos animales no son mascotas, ellos deben están en su lugar, aún que parezca inofensivo y uno pueda encariñarse no debemos tenerlo en nuestros hogares. Ojalá su recuperación sea rápida y pueda estar en su lugar”.