Vicky Xipolitakis pidió arresto domiciliario para su ex pareja, Javier Naselli. Según dijo la mediática, el banquero incumplió la cuota alimentaria de su hijo, Salvador Uriel. Ahora, la modelo le exige una cifra millonaria como compensación. Ella había comentado, en entrevistas pasadas, que su padre era quien mantenía económicamente a su hijo, mientras ella lo cuidaba. También agregó que el banquero ni siquiera le había preguntado por el niño “en plena pandemia”.
El abogado de la mediática, Martín Francolino, había elevado un documento a la Justicia, que decía: “Conforme a la veracidad de los hechos investigados y a efectos de asegurar la comparecencia del requerido proceso, solicito disponga el arresto domiciliario o prohibición de la salida del país”. Esta medida se solicitó a fines de que el banquero no pudiera escapar de la causa y entorpecer así el proceso judicial. Se pedía arresto domiciliario y la prohibición de salir del país.
¿Cuánto le exige Vicky Xipolitakis?
Ahora, Vicky Xipolitakis le reclama a su ex pareja 28 millones de pesos. En medio de este conflicto, se conoció que el sueldo de Javier Naselli es de 500 millones de pesos. Naselli es vicepresidente senior del UBS Investment Bank en Estados Unidos. En el documento se solicita que “se condene al accionado a abonar la suma de veintiocho millones de pesos, o lo que más o menos resulte de la prueba a producirse en autos; en concepto de compensación económica, más sus intereses y las costas de este juicio”.
El pedido de la mediática sería una compensación por los daños que el banquero le causó cuando le pidió trasladarse a los Estados Unidos. Según dice el documento, ella tenía una “ascendente y prometedora carrera artística”, que debió interrumpir para viajar a Norteamérica. Además, asegura que esta decisión la toma ante “la permanente presión psicológica que él ejercía para que abandonara su trabajo”, ya que consideraba que podía perjudicarlo en su imagen pública.
El documento finalizaba diciendo: “Fueron constantes las presiones para que abandonara sus obligaciones laborales. El demandado temía que sus actividades perjudicaran su carrera como alto ejecutivo del mundo de las finanzas”. Además, se nombraba que esta suma de dinero cumpliría la función de “solidaridad postconyugal” para evitar que el divorcio sea la causa del enriquecimiento de una parte y el empobrecimiento de la otra. Para saber más sobre este tema, te recomendamos la siguiente nota.