Lourdes Sánchez estuvo como invitada junto a Freddy Villareal en una nueva edición de Podemos Hablar. Luego de que Freddy contara su experiencia cercana con la muerte, fue el turno de la bailarina. “En mi vida tuve muchos episodios muy riesgosos con el tema de la salud, desde chica. Tuve un aneurisma a los siete años. Zafé de esa, fue realmente un milagro. Todavía no entendemos qué pasó. No me llegaron a operar, mi mamá me llevaba a una monjita que me ponía la mano en la cabeza y rezaba. Ella desapareció, no entendemos”, comentó.
Entonces Sánchez relató lo que le pasó: “El año pasado tuve una complicación al volver de un viaje que pensaron que era algo muy simple, me medicaron con algo que no era. Volví del viaje ya muy mal en el avión, con dolor de panza. Pensaron que tenía una intoxicación, me dieron unos antibióticos, zafé unos días del dolor y después reapareció, volvió más agudo. Me hice unos estudios y tenía unos quistes en los ovarios y después aparecieron más, así que decidieron operarme de urgencia”.
La joven explicó lo que pasó en el quirófano: “Cuando estaba entrando al quirófano llegué a saludar a mi marido pero me tenían que operar en ese momento. Él estaba en mi casa, agarró el auto y vino rápido. Nos damos un beso y yo entro llorando. Porque es una situación muy traumática, muy fea. Mi ginecóloga me dijo: ‘Te tenemos que operar ya’. La cirugía dijeron que iba a ser simple, 40 minutos y salía. Y la realidad es que duró cinco, seis horas. Me tuvieron que sacaron las trompas porque había una infección muy grande, y también el apéndice”.
“Me moría”
Lourdes explicó: “El Chato era el que iba confirmando qué podían sacarme. Lo llamaban él y le decían: ‘Le tenemos que sacar las trompas, si no, se muere’. Él tenia que tomar esa decisión. Yo me enteré de todo esto recién al otro día. Me dijeron ‘te tuvimos que sacar tal y tal cosa’, cuando era una operación muy simple. Era eso o realmente me moría. Y ahí es donde yo le tomé mucho más valor a él (Prada). Lo volvería a elegir una y mil veces. Salió todo bien, pero escuchar que te digan que estuviste al borde de la muerte es fuerte”
Luego de relatar esa experiencia, pasó a contar algo paranormal que le tocó vivir cuando era chica. “Siento que soy como una nena eterna y a veces mi cabeza me lleva a ver cosas que yo quiero ver. Me pasaba cuando era chica, o más bien adolescente, que yo veía o creía ver duendes”. Andy Kusnetzoff le preguntó “¿Pero los veías o los imaginabas?”. Lourdes respondió: “No sé. Supongo que habrá estado en mi imaginación. Uno con la imaginación puede ver lo que quiere. Yo sólo miraba como trabajaban. Pasaba mucho tiempo en el teatro, en Corrientes, y hacía como que los veía en las luces”.