Elian Kotler condenado por matar a Pablo Camaño en un accidente de tránsito vive más afuera que adentro del Penal. Sale con diferentes excusas y permisos especiales por supuestas dolencias pero ahora hace rato que no regresa al Servicio Penitenciario Provincial, lo que inquietó a los demás presos “pobres” que no pueden tener los privilegios del hijo de uno de los mayores proveedores del Estado. La pandemia da para todo.
Elian goza de la libertad que puede comprar el dinero. No es lo mismo estar todo el tiempo en el penal que tener salidas aunque sean transitorias, además “autorizadas” es decir sin infringir –aparentemente- la ley. Al fin y al cabo, el condenado no tiene la culpa de ser multimillonario y que el sistema sea corrompible. Desde que salió Elian parece que no volvió más porque los presos de “escasos recursos” ya comenzaron a extrañarlo.
Salidas camufladas
Kotler fue noticia por salidas camufladas del SPP pero que quedaron registradas en el libro del Penal y, si bien al principio lo negaron, después se aceptó que tenía autorización al tiempo que se afirmó que Elian tiene los mismos derechos que cualquier preso, por lo que solo hacía uso de los mismos. Nada ilegal, solamente que al principio era un secreto y luego se filtró lo que complicó las minivacaciones que se tomaba este preso vip.
Sin embargo, a pesar de que el capital de los Kotler es enorme, el padre Raúl, un magnate que hizo negocio con todos los gobiernos, juró que la familia de Pablo (el joven asesinado) no recibiría un centavo de su peculio. Prefiere gastar la plata en coimear autoridades y comer asado con los políticos encumbrados de Catamarca y no resarcir económicamente a la familia del muerto.
Trascendió que el niño rico tiene custodia en la puerta de la habitación de una clínica privada, que le llevan comida, que recibe visitas, que va la novia. Ahora se aduce en la ausencia del recluso adinerado una dolencia en los testículos. Mientras tanto los presos pobres llevan vida de presos, de condenados. Sienten la diferencia de trato del “sistema” entre un preso que tiene guita y un pobre infeliz que no tiene un mango.