La droguería Suizo Argentina llegó a Tucumán, pese a las quejas de las cámaras de comercio y de las otras empresas del tipo que funcionaban en la provincia, se cumplió el capricho del gobernador Juan Manzur. El mandatario provincia blindó la llegada de la empresa con una exención impositiva sin precedentes en la provincia. La gestión del mandatario defendió este beneficio aseverando que otras compañías también fueron favorecidas por el sistema tributario provincial, entre ellas se nombró a Arcor. Una empresa de golosines que en la provincia emplea más de 10 veces el personal que pretende contratar la droguería y que además produce alimentos de primera necesidad y tiene su propio ingenio, uno de los más amigables con el medioambiente en todo el país..
La empresa distribuidora de medicamentos, perteneciente a la familia Kovalivker recibió una exención tributaria que redondea los 400 millones de pesos. En una provincia como Tucumán con una crisis de seguridad, de infraestructura y de vivienda es sumamente sospechoso y hasta rayano con lo deshonesto que se haya decidido gastar $400 millones en una empresa que apenas aportará a la provincia 50 puestos de trabajo.
Pero ese dinero que se le perdonó a la empresa en concepto de ingresos brutos, no sólo es una cifra en un papel, sino que podría haber servido para solucionar algunas de las miles de falencias que a diario le hacen a los tucumanos la vida más difícil en las tierras que Manzur gobierna como un feudo.
La provincia hoy vive una crisis de infraestructura como nunca antes en su historia, por eso es de extrañar que no se haya atendido a una de las principales quejas de los tucumanos. Si bien está en el orbe municipal, afecta a cientos de miles de tucumanos, los baches en las calles. “Calcular cuántos baches podría taparse con el sistema tradicional es algo complejo, porque los precios, sobre todo en la mano de obra son variables”, según se explicó en una nota de El Intransigente.
No obstante asfalto en frío es hoy el sistema de bacheo más costoso, pero el más eficiente y el más simple a l hora de calcular los costos, el hecho de no necesitar tiempo de secado hace que las reparaciones sean mucho más rápidas, algo fundamental en las ciudades modernas. El metro cuadrado de bacheo, con colocación incluida, ronda los $2.500. Estimando que haya 10 baches por cuadra, de 1×1 metros, costaría $25 mil cada cuadra. El resto es matemática simple, $400 millones dividido en $25 mil, nos indica que se podrían bachear 16 mil cuadras. La cantidad es tan abrumadora que para que se entienda podemos decir que con ese dinero se podría bachear todo el camino que hay entre el acceso a la ciudad de Tucumán y el acceso a la ciudad de Santiago del Estero.
La inseguridad
Pero un problema mucho más grave que los baches aqueja a la provincia que gobierna Manzur y a la que la Droguería Suizo Argentina dejará de tributarle una millonaria suma. Es el flagelo de la inseguridad, ahí es donde más duele que falte el dinero. Un agente de policía en Tucumán, hoy gana 17 mil pesos de básico, pero gracias a distintos ítems que se cargan en su boleta de sueldo, llega a cobrar alrededor de 43 mil pesos, es decir que con el dinero que hoy el Estado le regala a la droguería porteña se podría contratar por un año a más de 700 policías, que servirían para frenar la ola de inseguridad que se cobra año a año la vida de decenas de tucumanos.