A poco menos de dos semanas para la realización de las Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) del 11 de agosto, tuvo un lunes en el que la moneda que es elegida por todos los ahorristas argentinos según el economista Manuel Adorni. El dólar tuvo una suba de 42 centavos, para terminar, cotizando en los $44,93, es decir, rozó los $45. Esto puede determinar el marco para la realización de las elecciones que dan u boleto a las generales del 27 de octubre.
De esta manera y gracias a este importante aumento que experimentó la divisa norteamericana, se tocó nuevamente el nivel máximo, teniendo en cuenta las últimas seis semanas en lo que parece ser el fin de la paz cambiaria que el país venía atravesando en junio y buena parte de julio del vigente año, que tan bien le cayó al Gobierno en medio de la campaña, según informa el diario El Intransigente.
Esta nueva realidad económica se da en el marco de una creciente cobertura que llevan a cabo los fondos de inversión que decidieron dolarizar sus carteras ante la llegada inminente de las elecciones, que generan incertidumbre ante la falta de certeza de la continuidad del oficialismo esperada por los mercados internacionales.
El ascenso de la moneda extranjera no pudo frenarse ni siquiera con una nueva intervención a cargo del Banco Central de la República Argentina (BCRA) en el mercado de futuros, luego de que el Fondo Monetario Internacional (FMI) le permitiera tener injerencia a la hora de mantener bajo control el sistema cambiario.
Teniendo en cuenta el promedio en el cual la divisa cotizó hoy en las principales entidades financieras de la city porteña, la suba registrada empardó el nivel más alto que ostentó el pasado 18 de junio. En el Banco Nación, el tipo de cambio llegó a los $44,80, mientras que el dólar mayorista aumentó 48 centavos y trepó a los $43,83.
A las razones internas por las cuales el billete verde volvió a la senda alcista se le deben sumar factores externos. En este sentido, desde el exterior se generó una presión extra a la baja generalizada de las monedas de la región frente al dólar, cuando restan dos días para el comienzo de la reunión de la Reserva Federal de Estados Unidos.
En esa línea, así como el peso argentino se devaluaba en esta jornada un 1%, su par mexicano lo hacía en torno a un 0,4%, exactamente lo mismo que sucedía y en igual porcentaje que en Colombia. Por su parte, el real brasileño se depreciaba un 0,6%, mientras que la moneda chilena confirmaba un retroceso leve del 0,3%, por lo que Latinoamérica sintió el efecto previo a que se produzca el encuentro de la Fed.
