El periodista, conductor de “Cada mañana”, se hizo eco del estreno de la serie documental que trata sobre la muerte del fiscal Nisman. En su editorial conversó acerca de uno de los hechos políticos mas importantes de la década. “Tiene tres protagonistas: el fiscal, la presidenta y el espía Stiusso. Al documental lo hizo un documentalista británico, que presentó varias biografías televisivas”, describió.
Según una nota que publicó El Intransigente, el conductor de ‘Cada Mañana’ se encargó de analizar ciertos pasajes de la serie hizo hincapié en la postura del presidente de la Nación, Alberto Fernández, figura que aparece en el documental. “Dentro de esta presentación de Netflix aparece una contradicción del presidente Fernández, que al conversar con la gente de Netflix, en el año 2017, dijo una cosa, una cosa que venía bastante conectada, de manera coherente, con la postura de Alberto con el tema Nisman y sobre el tema del acuerdo de Argentina con Irán”, le informó a la audiencia.
En este punto, recordó que el actual presidente publicó un artículo en el diario La Nación, en el que le hace una crítica severa a Cristina Fernández de Kirchner, la actual vicepresidenta. “Los comentarios de Fernández nos conectan con dos inconvenientes, la última definición del ahora presidente, la idea de comparar el caso Nisman con una novela policial y sugerir que aquí se pretendió perjudicar a la señora Kirchner me parece un comentario no solamente inapropiado, sino que no puede tener nada que ver con la realidad”, sostuvo el conductor radial.
De acuerdo con Longobardi, el caso Nisman sigue siendo “un tema eléctrico para la Argentina, donde se mezcla todo, la política internacional, los problemas judiciales, los papeles de los sistemas de inteligencia”. “Todavía hay mucho por saber y acá el presidente ha mostrado una posición contradictoria, que nos remite al problema de la política. La política es una construcción siempre, la política es sumar, no restar”, planteó.
Finalmente, aseguró que el caso Nisman traspasa los límites de la construcción política, para presentar una contradicción muy complicada en un tema, como antes dijo, “eléctrico”. “La presidente dijo primero que fue un suicidio un asesinato, después a la inversa. Ahora es el propio Alberto el que asume esas dos caras. Esas dos posiciones, con poco tiempo de diferencia, van ser un temazo en Argentina, tanto el tema de Nisman, como esta primera contradicción”, concluyó.
