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El País

El dólar tendrá una mayor presión por la crisis internacional

El economista Gabriel Rubisten dio su opinión sobre este momento.

El coronavirus está causando temor en todo el mundo por su rápido expansión. Esto no solo trae consecuencias en la salud, sino que también afecta a la economía de los países. Esto se debe que en las últimas semanas se dio un desplome en las exportaciones, lo que reflejó un menor ingreso de divisa extranjeras a Argentina En este sentido, el economista Gabriel Rubisten dio su opinión sobre este momento y el dólar.

La compleja situación internacional ante la expansión del coronavirus derivó en una desaceleración de la actividad económica mundial. También ocasionó un desplome en el petróleo y una caída generalizada en las plazas financieras durante el inicio de la semana. Las monedas de los países de la región fueron devaluadas frente al dólar. Argentina por el momento optó por no seguir el ritmo.

Este martes, en un contexto de mayor calma, moderada actividad y cierta recuperación global, el denominado dólar solidario, que incluye el recargo del 30%, experimentó un leve avance de tres centavos y cotizó a $84,14. El día anterior, se había mantenido estable por intervención del Banco Central, el cual debió vender US$ 100 millones, según fuentes del mercado. Así, la divisa se mantuvo con limitados movimientos pese a que, por ejemplo, el real se devaluó en torno a un 15% a lo largo de 2020.

Para Rubinstein, la crisis internacional tiene un “efecto negativo dada la menor demanda y exportaciones”. Además, agregó: “Habrá presión alcista porque están devaluando los países vecinos ya que la situación mundial empeoró. Los países se tornan más débiles y eso se refleja en el valor de la moneda. Esto afectará también los salarios. A su vez, crecerá la brecha cambiaria”.

Aseguró que el contexto perjudica “la recuperación salarial” y el ingreso de divisas, con lo que el Gobierno tendrá una menor recaudación. Aclaró que, si bien no es un efecto “directo”, al haber un menor nivel de actividad, caerá la recaudación. “Va a ser difícil sostener el nivel de gasto porque va a haber menos ingresos”, pronosticó Rubinstein en su análisis.

Fuente: NA