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El País

Caamaño denunció a Macri por la venta de armas en la AFI

La funcionaria lo acusó por la presunta venta irregular y a precio irrisorio de armamento a funcionarios y a agentes.

En la jornada de este martes, la interventora de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) volvió a realizar una denuncia en contra del expresidente, Mauricio Macri. En esta ocasión, la funcionaria lo acusó por la presunta venta irregular y a precio irrisorio de armamento a funcionarios y a agentes. A su vez, en la presentación también están los nombres de Gustavo Arribas y Silvia Majdalani.

La denuncia por supuesto abuso de autoridad, violación de deberes y defraudación por administración fraudulenta resultó sorteada en el juzgado federal de Daniel Rafecas. Intervendrá el fiscal Federico Delgado, según el trámite cumplido en los tribunales federales de Retiro, informaron fuentes judiciales. En el caso de Macri, se lo denunció “en su calidad de responsable de fijar los lineamientos estratégicos y objetivos generales”.

En la denuncia de Caamaño se aludió a dos resoluciones dictadas por el extitular de la AFI, Arribas. Esto en agosto de 2017 y diciembre de 2018. Las mismas estaban supuestamente “carentes absolutamente de sustento jurídico y fáctico”. Estos dictámenes abrieron la puerta a la venta a precio “irrisorio” a funcionarios y agentes en actividad de 290 armas “aptas para el disparo y utilización”.

Los 73 agentes que compraron las armas pagaron precios que no alcanzarían “el 20 por ciento del valor real de un arma usada en el mercado formal”, según la denuncia. Se subraya que se vendieron “artículos de colección que no se consiguen en ningún lado” como revólveres Ruger y Colt Trooper. El primero “tenía la leyenda que decía ‘200 años de la libertad de América’”, destacó la presentación de Caamaño.

¿Quiénes fueron denunciados por Caamaño?

Además de Maurico Macri, Arribas y Majdalani se denunció a otro exfuncionario de la AFI. La identidad se mantuvo en reserva en base a los lineamientos de la Ley Nacional de Inteligencia. Las resoluciones que permitieron las ventas declararon al armamento “en condiciones de rezago” porque no resultaba “económicamente rentable ni factible su recuperación”.