Connect with us

Hi, what are you looking for?

El País

5 millones de personas: el problema de los que no pueden trabajar desde casa

En Argentina hay 5,3 millones de “no teletrabajantes”, según el CIPPEC.

A raíz de la situación epidemiológica que nos toca atravesar por la pandemia del covid-19 y con el objetivo de evitar la propagación del virus, millones de personas debieron adoptar sus modalidades de trabajo y, aquellos que pudieron, adaptaron sus ámbitos laborales a sus hogares. Sin embargo, la realidad es muchos no pueden hacerlo ya que aproximadamente 5,3 millones de personas tienen actividades que no pueden adaptarse a la distancia y que se desarrollan en la informalidad.

Gran porcentaje de este grupo pertenece a sectores socialmente vulnerables. El Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (CIPPEC) decidió denominarlos como “los no teletrabajantes”, entre los que se encuentra el servicio doméstico, personal no docente de servicios educativos, construcción, comercio, industria y gastronomía, sectores que se encuentran entre los menos beneficiados por las restricciones de movilidad social dispuestas en la cuarentena.

CIPPEC clasificó a esta “masa” de no teletrabajables en tres grupos de acuerdo a su nivel de proximidad de riesgo de contagio. Ramiro Albrieu y Megan Ballesty hicieron hincapié en el grupo de trabajadores no exceptuados en los inicios de la cuarentena y no teletrabajables, “aquellos que por no calificar para una excepción al aislamiento ni poder realizar sus tareas en forma remota, enfrentan mayor vulnerabilidad económica frente a las medidas de aislamiento impuestas por la pandemia”.

En el grupo de actividades vulnerables de baja proximidad, se desempeñana aproximadamente 800.000 trabajadores, por lo general con poco contacto con otras personas. En este grupo “se destaca que 660.000 son menores de 60 años y, por lo tanto no son parte de la población de riesgo”, un 90% son mujeres, el 60% trabaja en la informailidad y un 65% de los que declaran ingresos se agrupan en el 30% de la estructura laboral con menos ingreso.

El segundo grupo se integra por 3.6 millones de personas en el que el 75% son hombres y aproximadamente el 50% trabaja en la informalidad, el 80% de las ocupaciones son de capacitación operativas con un 2% de calificación profesional. Las principales actividades se basan en el comercio, la construcción y la industria, que en total representan un 70% del grupo, mientras que, para la economía general llegan al 40%.

El tercer grupo se focaliza en las actividades vulnerables de mayor proximidad con un poco menos de un millón de trabajadores. De ellos, el 20% supera los 60 años. “Es un sector de alta vulnerabilidad social en donde la informalidad alcanza el 55% y las ocupaciones operativas y no calificadas comprenden al 80% de los ocupados”. El 65% son mujeres que se dedican principalmente a los servicios domésticos, también en servicios personales, actividades relacionadas con la enseñanza, servicios de alojamiento, gastronomía y comercio.