El 2020 fue un año totalmente atípico para todo el mundo. La llegada del coronavirus cambió totalmente los planes del gobierno, y cuidar la salud se convirtió en el principal objetivo. El próximo año será totalmente complicado para Argentina, no solo porque seguirá la pandemia, sino que también habrá elecciones. En este contexto, Eduardo “Wado” De Pedro aclaró que las PASO 2021 se realizarán.
El Intransigente informó que el funcionario nacional le comunicó a la máxima autoridad porteña que no se suspenderán las PASO de las elecciones legislativas del próximo año. La información fue confirmada por el presidente de la UCR, Alfredo Cornejo. Esto luego de que trascendiera que el Gobierno manejaba la posibilidad de anular esta instancia electoral por el alto costo que significa.
De la misma manera que Cornejo desmintió los supuestos. Desde el ministerio que conduce Wado de Pedro aclararon en la semana que se trabaja con el cronograma electoral vigente. “Se está trabajando según la Ley 19.945 (Código Electoral Nacional) para las PASO 2021“, aseguró la secretaria de Asuntos Políticos del Ministerio del Interior, Patricia García Blanco. Además, aclaró que cualquier modificación «debe ser realizada por ley y debatida en el Congreso de la Nación».
El trascendido periodístico sobre la suspensión de las PASO 2021, había encendido las alarmas dentro de Juntos por el Cambio. Este espacio, tras la salida de Mauricio Macri, mantiene la unidad pero sin un liderazgo definido. Ante este escenario, las internas serán una instancia clave para la fuerza opositora. La misma tendrá una amplia competencia en muchos territorios entre figuras del PRO, el radicalismo, la Coalición Cívica y hasta el espacio peronista.
La palabra de Diego Santilli sobre las PASO 2021
El vicejefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Diego Santilli, había planteado ayer que “cualquier decisión que se tome tiene que tomarse por consenso”. Resaltó que “uno no puede per se cambiar las reglas de juego”. Según precisó el funcionario porteño, la suspensión implicaría por un lado el ahorro fiscal en el actual contexto de restricciones por la pandemia. Pero, por el otro lado, le quitaría a los partidos políticos un instrumento “importante” y “sano”.
