El próximo 31 de marzo, Meghan Markle y el príncipe Harry harán definitiva su despedida la realeza. Es que la pareja decidió vivir una vida alejada de las presiones del reino en Norteamérica. Es por eso que esta semana, visitaron el Reino Unido con el objetivo de decirle adiós a la reina, antes de decirle adiós para siempre a su título de “duques de Sussex”.
Esta mañana, Meghan y Harry viajaron a Londres con la excusa de celebrar el Día de la Commonwealth, aunque esto en realidad, será un anticipo de su despedida. Además, anoche los duques de Sussex asistieron al Festival de Música de Mountbatten en el Royal Albert Hall. Este sería uno de sus últimos compromisos como reales.
La pareja se mostró vestida en conjunto, ambos estaban completamente de rojo. Esto despertó los suspiros de los espectadores, que además, se conmovieron por un pequeño pero significativo detalle. El príncipe Harry y Meghan Markle no se soltaron la mano en toda la noche. Un gesto que deja ver cómo Meghan y Harry le dicen adiós a su reino y emprenden una nueva vida juntos.
El festival al que asistieron Meghan y Harry conmemoraba el aniversario número 75 del fin de la Segunda Guerra Mundial, además del aniversario 80 de la formación de los comandos británicos. El duque de Sussex se reunió con veteranos, miembros del servicio, músicos, compositores y conductores internacionales de la banda de Royal Marines, para recaudar fondos para esta organización.
Los duques tuvieron que enfrentar varios desafíos antes de soltarse de la realeza. Por empezar, fueron muy criticados por la prensa británica. Su decisión se tildó de “impopular”. Cuando la reina finalmente les dio su aprobación, la pareja tuvo que buscar sustento económico. Eso no les costó mucho, ahora se desempeñarán como conferencistas. Algo que sí fue difícil para ellos, fue el tema de la seguridad. Ya no tienen guardia real que los defienda. Para saber más, te recomendamos esta nota.
