En la década de los noventa, uno de los programas de mayor audiencia de la televisión argentina era “Chiquititas”. Producido por Cris Morena. Tanto jóvenes como adolescentes y niños no se perdían el programa que se emitía por Telefé de lunes a viernes. Sus actrices gozaban de tal popularidad que hasta se les dificultaba salir a la calle. El éxito había llegado hasta límites inesperados. Una de las protagonistas era Nadia Di Cello.
La actriz nacida en Ciudad de México, naturalizada en Argentina debutó en la pantalla chica en el año 1996, cuando fue convocada por Cris Morena para formar parte del elenco que rompería récord de audiencia. La joven de 31 años se encuentra actualmente involucrada un una cuestión judicial bastante grave que tiene que ver con el tráfico de drogas. Su marido Fernando Migliano fue detenido en estos días acusado de estar implicado en un tema que atañe al comercio drogas ilegales.
El conductor de LAM ( Los Ángeles de la Mañana), Ángel de Brito dio algunos detalles referentes al tema: “El marido de Nadia Di Cello, la actriz que muchos la conocemos por saltar a la fama en el programa de Chiquititas, está acusado de narcotráfico, de venta de estupefacientes. Hace un tiempo hubo un allanamiento, donde encontraron cocaína, LSD, 9 plantas de marihuana, balanzas. O sea, todo el dispositivo para la venta de estupefacientes”.
Además Ángel de Brito agregó: “En el operativo que tuvo lugar en Villa Adelina, que sería el hogar de residencia de esta familia, no solo secuestraron estupefacientes, además secuestraron entre otras cosas un Audi, una moto y una computadora que tendrá que investigar la justicia para ver su contenido. El expediente describe incluso cada planta de marihuana que se encontró en el lugar del allanamiento”, detalló el conductor.
Además el presentador del programa mañanero leyó el acta de allanamiento del imputado: “Había una trincheta y vestigios de la venta que había sido fraccionada. Se encontró una bolsa de nylon negra que contenía un trozo compacto, un ‘ladrillo’, de color blanco similar al clorhidrato de cocaína. También LSD. Bolsas con éxtasis. Envoltorios para la venta. Es una enumeración larguísima de todo lo que se encontró”.
