Desde el 20 de marzo, los argentinos estamos atravesando un aislamiento social, preventivo y obligatorio. Esta medida benefició al sistema de salud, pero dañó la economía. En este contexto, el gobierno de la nación sacó un decreto a finales de marzo donde prohibió los despidos. En la jornada de este lunes, el Poder Ejecutivo extendió esta normativa por 60 días más. Solo se podrán aplicar si se hacen de mutuo acuerdo.
NA informó que en el marco de la emergencia sanitaria, el presidente, Alberto Fernández, extendió el plazo por el que se bloquean los despidos sin justa causa. También por las causales de falta o disminución de trabajo y fuerza mayor. Se impide la posibilidad de efectuar suspensiones con los mismos motivos. Igualmente, se pueden realizar de mutuo acuerdo y deberán ser homologadas por la autoridad de aplicación.
“Aquellos despidos o suspensiones que se dispongan en violación a lo dispuesto por esta normativa no producirán efecto alguno. Se mantendrán vigentes las relaciones laborales existentes y sus condiciones actuales”, señala la disposición firmada por el jefe de Estado. El primero de abril entró en vigencia el Decreto de Necesidad y Urgencia 329 avalado por Fernández.
En aquel momento, para tomar la medida, el Ejecutivo señaló que, ante la crítica situación generada por la pandemia del coronavirus, “resulta indispensable garantizar la conservación de los puestos de trabajo”.
En paralelo con esa normativa, el gobierno adoptó una serie de disposiciones para paliar los efectos del parate económico como consecuencia de la cuarentena.
La demás medidas del gobierno
Entre esas medidas, impulsó el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) consistente en una suma de 10 mil pesos. Esto es para todos los trabajadores informales y que por la cuarentena estaban imposibilitados de realizar tareas. También puso en marcha la ATP. En este programa, el Poder Ejecutivo cubre una parte del sueldo de cada trabajador del ámbito privado.
