Mediante la Ordenanza N° 1190/20 se declaró como reserva natural a la zona de la Quebrada de Belén. El proyecto consta principalmente de la preservación de lo natural con la existencia de la flora y fauna propia del lugar, como así también la protección del Río Belén. Además, se generarán cuatro paradores para que las personas puedan detenerse y disfrutar de las vistas panorámicas.
Sobre los paradores en la Quebrada de Belén, la Secretaría de Turismo de la ciudad informó que comenzaron las obras. “En los mismos, ya se trabaja con la implementación de barandas de seguridad, cartelería informativa y de prevención, cestos de basura, bancos y estacionamiento”, agregó. En el lugar se colocarán réplicas de animales propios del departamento: quirquincho, suri, liebre, llama y vicuña.
“Cabe destacar el aporte de la Cámara de Turismo de Belén y el buen trabajo en conjunto entre el sector público y privado”, finaliza la publicación. Hay que recordar que la Quebrada de Belén es un atractivo recorrido de 11 km al norte de la ciudad. El mismo se abre paso entre imponentes montañas y el sutil caudal del rio, configurando inolvidables postales para todos los visitantes.
En la publicación oficial aparecen las imágenes de las imitaciones de los animales propios del departamento. El río junto a la quebrada forma el atractivo paseo para los locales y visitantes que arriban al lugar para disfrutar el maravilloso paisaje. Con los nuevos trabajos se busca fomentar e impulsar el turismo en la región que tan afectada estuvo por la pandemia del Covid-19.
Detalles de la obra en la Quebrada de Belén
La obra ya instalada fue realizada por el artista Nerio Antonio Casimiro de 26 años y oriundo de la ciudad. Además, los trabajos de pintura estuvieron a cargo de Fernanda Miranda y sus ayudantes Víctor Pereyra y Esteban Saracho. El quirquincho tiene 3,50 metros de largo y 1,20 metros de altura, por otro lado, las autoridades informaron que su estructura es de hierro y concreto.
