Con el inicio del ciclo lectivo 2021, los docentes y los alumnos pudieron volver a las aulas luego de un 2020 sin presencialidad. Para esto, se diseñó un protocolo para que haya burbujas preventivas y que la comunidad educativa pudiera desarrollar su actividad sin problemas. Igualmente, por la ola de casos de Covid-19 que se viene sufriendo en la provincia, Andalgalá, Capayán, Santa María y Pomán siguen sin clases presenciales.
Teniendo en cuenta la situación epidemiológica de los departamentos Andalgalá, Capayán, Santa María y Pomán y siguiendo las recomendaciones sanitarias previstas por el COE Salud, el Ministerio de Educación, a través de la Secretaría de Gestión Educativa informa que estas jurisdicciones continuarán por el lapso de una semana más bajo la modalidad virtual. Esto es sin asistencia a los establecimientos educativos en todos los niveles y modalidades.
La presencialidad será retomada a partir del próximo 19 de abril. Esto siempre de acuerdo a los resultados de la evaluación epidemiológica local en cada uno de las jurisdicciones mencionadas. En las jurisdicciones de Mutquín, departamento Pomán y Aconquija en el departamento Andalgalá, los docentes residentes continuarán con el desarrollo de las actividades presenciales. Mientras que los no residentes lo harán desde la no presencialidad.
Cabe recordar que en todos los casos las actividades educativas previstas se desarrollarán acompañando y fortaleciendo el proceso de enseñanza y aprendizaje desde la no presencialidad, con actividades virtuales. En cuanto al resto de las otras 12 jurisdicciones educativas de Catamarca, se ratifica el sistema bimodal. Esto es alternando clases presenciales y virtuales de acuerdo a lo pautado para el presente ciclo lectivo, marcado por la pandemia.
Además, se continúa analizando el avance epidemiológico en relación a la presencialidad, con la circulación de la comunidad educativa, ratificando en todos los ámbitos la voluntad institucional y política de mantener la presencialidad segura para docentes y alumnos con la aplicación de los protocolos necesarios por lo que es vital que las familias, docentes y padres cuiden las actividades de sus hijos de los entornos sociales no regulados y que pudieran representar riesgos, a los efectos de que la escuela siga trabajando presencialmente.
