En la jornada de ayer y con gran presencia de fieles, inauguraron el templo en Valle Chico, bajo el patrocinio de Nuestra Señora de Guadalupe. El acto se realizó en el cierre del triduo en honor de la Santa Patrona. El mismo contó con la presencia del Obispo Diocesano, Mons. Luis Urbanc; el párroco de San Pío X; Pbro. Héctor Salas; el comisario Walter Espilocín y personal de la Comisaría 11°, entre otros.
Seguido de la entonación de las estrofas del Himno Nacional y el Himno a Catamarca, se escuchó el mensaje del anterior párroco, Pbro. Sergio Chumbita. El mismo recordó a quienes trabajaron en los comienzos de la labor evangelizadora en la zona, especialmente catequistas. Además, felicitó a toda la comunidad y al actual párroco por este logro que terminó con la inauguración del templo en Valle Chico.
Una de las representantes de los fieles agradeció al Obispo por la decisión de apoyar este histórico proyecto. “El anuncio, hace un año, de la construcción del templo financiado por la diócesis, nos llenó de esperanza en los últimos tiempos difíciles que estábamos viviendo”, indicó. Además, se dirigió a Luis Urbanc y dijo que “con su presencia paternal nos sentimos bendecidos y acompañados por Jesús”.
Luego de la entrega de diplomas al Pastor Diocesano y al párroco, se procedió al descubrimiento de la placa y el tradicional corte de cintas. De esta manera, quedó oficialmente inaugurado el edificio sagrado en el complejo Valle Chico. Los presentes ingresaron al templo para participar de la Santa Misa presidida por Mons. Urbanc y concelebrada por el padre Salas, con lengua de señas.
En el comienzo de la Eucaristía, el Obispo bendijo el agua con la que roció a los presentes y el templo. “Este tercer domingo de Adviento está caracterizado por ser una invitación a la alegría. Quiera Dios que puedan seguir consolidando el camino de evangelización”, remarcó. Por último, hizo alusión al “gran esfuerzo que hizo la diócesis para que tengan este templo, ahora ustedes acepten el desafío de seguir trabajando”.
