Preocupa la salud del papa Francisco, por lo cual canceló todas sus actividades. Los dolores que el sumo pontífice tiene en su rodilla derecha vuelven a condicionar su cargada agenda, que debió suspender las audiencias previstas, entre ellas la reunión con el canciller Santiago Cafiero. En El Vaticano explicaron que el santo padre se ha sometido a controles médicos para ver los pasos a seguir para su pronta recuperación.
Según TÉLAM, el papa Francisco arrastra el dolor en la rodilla derecha desde inicios de año y ya debió cancelar varias actividades en las últimas semanas. El domingo, durante la bendición Urbi et Orbi que encabezó en Plaza San Pedro ante más de 100.000 fieles, la molestia le impidió leer todo su discurso de pie y debió sentarse en medio del mensaje pascual. El sábado, no lo dejó celebrar la ceremonia de la Vigilia Pascual en la basílica.
El representante de Dios en la tierra, se limitó a leer la homilía, bautizar a un grupo de personas y siguió la misa sentado en un sillón. La noche anterior, Jorge Bergoglio tampoco pudo postrarse en el suelo de la basílica de San Pedro por la Pasión del Señor, durante el Viernes Santo, cuando la Iglesia recuerda el calvario y muerte de Cristo en la Cruz. Tras el dolor, debió ausentarse de la procesión del último Domingo de Ramos, el 10 de abril.
Se supo que el 3 de abril, al regresar de un viaje de dos días a Malta, Francisco manifestó en conferencia de prensa que su salud “es un poco caprichosa”. “Tengo este problema en la rodilla que provoca problemas de deambulación, es un poco molesto, pero va mejorando, al menos puedo andar. Hace dos semanas no podía hacer nada. Es algo lento; veamos si vuelve a estar como antes, pero está la duda”, explicó.
Para cerrar, el papa dijo que “a esta edad no se sabe cómo terminará el partido, esperemos que vaya bien”. El 26 de enero, aclaró que por primera vez que tiene inflamado un ligamento en la rodilla que le obliga a reducir sus movimientos, aunque calificó a la dolencia como “algo pasajero”. “Me han dicho que le pasa solamente a los viejos, así que no sé por qué me ha pasado a mí”, agregó en broma el pontífice durante la Audiencia General en el Vaticano.
