La cuestión salarial siempre es un tema de discusión. Los Ñoquis, Supervisores con Punto Índice pueden llegar a ganar más que los empleados y que los jefes, como sucede en diferentes reparticiones del Estado. El ñoqui no va a laburar pero cuando va al cajero se nota que es un favorecido por el sistema o, mejor dicho, el amiguismo o el parentesco. En esta oportunidad, el malestar es en OSEP, la hija del director Norberto Bazán, tiene una remuneración mejorada y superior a la de los profesionales que prestan servicio en la obra social estatal.
“Hay profesionales médicos en OSEP que están terriblemente enojados. Cómo puede ser que la hija de Bazán cobre mucho más que un profesional médico, mucha diferencia. Uno le pide a Bazán que mejore los sueldos y dice que no puede pero a la hija le dió un Punto Índice para que no pase necesidades y se de ciertos lujos”, expresan los empleados en un mensaje al Correo de lectores de El Aconquija.
Las designaciones familiares son cuestionables pero Bazán arribó a OSEP con su hija para ordenar la obra social con el argumento que necesitaba gente de confianza. Así, desde que comenzó con el ajuste en la obra social de los empleados públicos, el médico estuvo acompañado por su niña. Juntos, restringieron servicios y acomodaron las cargas para que la OSEP salga de los números en rojo que había dejado Julio Cabur. Igual, la gestión Bazán no termina de convencer.
Por otro lado, están los molestos con los ñoquis. Los Punto Índice que no justifican su sueldo con ninguna prestación de servicio y que la pasan mejor que dirigentes con mucha responsabilidad en áreas sensibles del Gobierno. Aunque últimamente se les buscó un lugar de trabajo o un trabajito qué hacer a los Punto Índice de Jalil, el malestar continúa por la diferencia en el cajero a fin de mes. Los ñoquis ganan mucho más que los jefes y obreros que se rompen el alma en Catamarca.
El Gobernador prometió terminar con los ñoquis pero los compromisos son más fuertes. Cada tanto aparecen en el Boletín Oficial dirigentes políticos contenidos bajo el concepto “Supervisor” con sueldos envidiables para cualquier trabajador catamarqueño. El fin de semana un ñoqui fue noticia por andar en una camioneta oficial comprando bizcochos y facturas. Otros conforman “familias de ñoquis”, como sucede con los Zenteno en Valle Viejo.
