En la jornada de ayer, se negó a declarar el policía, Diego Ortega, que baleó a su mujer y su hija en un nuevo hecho de violencia de género en Saujil. El efectivo policial se presentó en horas de la mañana acompañado por la defensora oficial, Cecilia Ontivero de Rojano. En la causa está acusado bajo la imputación de los delitos de “femicidio y femicidio por vínculo, ambos en grado de tentativa”.
Al mismo tiempo, se realizó una manifestación en Saujil encabezada por los familiares de los policías de la Subcomisaría local. Los mismos solicitaron que se restituya a los efectivos que fueron trasladados por orden de la Jefatura de la fuerza, luego de que se difundiera un video de Daniel Ortega tomando mate junto a ellos. Estas imágenes recorrieron todo el país y generaron un gran repudio.
“Soy mamá de uno de los afectados, pedimos que consideren la situación. Hugo violencia en contra de los policías y no estamos a favor. Estamos en contra de lo que pasó a Cinthia y nuestros familiares no ocasionaron el hecho, sino que resguardaron a la persona detenida. No entendemos de dónde salió tanta violencia”, reclamó una de las protestantes en diálogo con Catamarca en Cana.
Sobre esto, agregó: “Pedimos al jefe de Policía y al ministro, Gustavo Aguirre, porque estas personas solo cumplían órdenes. No somos quienes para juzgar el grade de responsabilidad de la persona detenida, eso lo determina un juez. Estamos en contra de la violencia”. Entre los pedidos, los manifestantes insistieron en que “ellos no son asesinos ni cómplices”, sino que cumplían con su trabajo.
Marcha en Saujil en pedido de justicia
Anoche se llevó adelante una marcha en silencio para pedir justicia por Cinthia y Ariana Aranda, ambas atacadas por el policía violento. En este marco, cientos de personas se congregaron en la plaza principal de Saujil para rogar por su pronta recuperación. “Pedimos que ellas sanen y todo se pueda remediar. Nos encomendamos a Dios”, expresó una de las oradoras durante la movilización.
