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Foto: Ministerio de Producción Catamarca.

Política

Productor asegura que el Gobierno de Catamarca no pudo con las langostas y que se fueron solas

Se acusa al Ministerio de Producción de la provincia de no actuar en el combate contra la plaga de insectos.

El productor Pedro Martínez se mostró indignado con el Gobierno de la Provincia con respecto a las langostas. Declaró que el ministerio encargado del área, el de Producción, “no existe en el problema”. “Producción no estuvo nunca ahí. No sé si se mató alguna langosta con las fumigaciones terrestres esas que hacían”, detalló furioso Martínez.

Por otra parte, reconoció el aporte y la ayuda de la intendencia de Huillapima. “Una sola vez nos ayudaron, el ingeniero Soria fue a ayudarnos porque tenía experiencia. Pero el Ministerio de Producción no apareció nunca”, declaró el productor a medios locales. También criticó que nunca se hizo relevamiento alguno en la zona de lo que se perdió.

Por otra parte, criticó al Gobierno por el tema del abastecimiento de agua. Cuenta sobre las promesas incumplidas y el mantenimiento de los canales, entre otras cosas. “No nos está llegando el agua y la gente encima tira mucha basura al canal. El zanjón que hizo la gobernadora en la localidad quedó provisorio desde enero”, criticó Martínez a la gestión de Lucía Corpacci.

“La gobernadora se sacó fotos con los colonos y prometió terminar la obra”, detalló el productor. “La primera lluvia que venga la deja sin agua a la colonia de Huillapima. Si no regamos, vamos a perder toda la producción. Lo poco que nos dejaron las langostas en realidad”, explicaba Martínez. El tema del agua es algo básico en la producción rural, y es increíble que no se lo solucione.

Entonces, Pedro Martínez ve dos problemas grandes en este aspecto. El primero, la ausencia de las autoridades, tanto del SENASA a nivel nacional y del Gobierno de Catamarca. Y el segundo, la falta de obras y presupuesto invertido en el tratamiento del agua. Con estos dos temas se vuelve muy difícil para cualquier arrendatario cultivar en condiciones decentes.