Mientras los padres hacían empanadas para que los chicos puedan viajar, resultó ser que el viaje para grabar la versión andina del Himno Nacional en Antofagasta de la Sierra el año pasado tenía un presupuesto millonario. El proyecto enamoró al Presidente, Alberto Fernández, que lo destacó en su cuenta de Twitter el pasado 11 de mayo pero la puesta en escena y la organización resultó ser un negocio con fondos públicos que podría terminar en la justicia con una denuncia penal.
Lo que disparó las sospechas sobre el video que emocionó al mandatario fue el maltrato y la falta de comida para los niños que formaban parte de la comitiva que viajó a la puna catamarqueña, testimonio duro brindado por el profesor Mario Toro. De acuerdo a lo trascendido, el proyecto costó entre 3 y 5 millones de pesos y fue pagado por varios organismos oficiales entre ellos Educación, Cultura, Turismo, Producción e incluso la Gobernación.
Uno de los responsables fue el músico Juan Ignacio Molina, ex alumno de Toro. El maestro lo acusa ahora de haberle robado la idea y de lucrar con los niños. Molina se defendió diciendo que Toro es un “mentiroso” y un “delincuente” que lo quiere “desprestigiar” que “la idea original fue de la ex gobernadora Lucía Corpacci” y que él no cobró un peso, que únicamente fue el “arquitecto” de la iniciativa de la ex primera mandataria.
“Educación estaba a cargo del traslado, de los choferes, hubo 5 camionetas 4X4 y dos combis. Turismo estuvo a cargo de los hospedajes, del baño químico. Cultura estuvo a cargo de los artistas. La secretaria de Ambiente estuvo a cargo la integración y cuidado del lugar. La TV Pública estuvo a cargo de la filmación” comentó Molina añadiendo que no le “consta” el mal trato a los pequeños o “que se les haya negado comida”. Asimismo, no quiso hablar de montos porque aseguró que desconoce.
Denuncia Penal
El diputado Tiago Puente está convencido que se desdoblaron los pagos para evitar licitaciones y sostuvo que hubo “altas” de AFIP que permitieron la facturación y “cambio de categorías” por lo que no descarta una denuncia penal. Entre otras cosas se investiga si Molina tendría un punto índice en la Provincia y si el proyecto millonario lo facturó un familiar. Los padres y la sociedad dolida por manchar una iniciativa que era orgullo de los catamarqueños donde participaron niños.