En el día de ayer, desde El Aconquija informamos sobre la cortina de humo que resultó ser el icónico Hospital Monovalente “Carlos G. Malbrán“, el cual lleva el sello de la gestión de Raúl Jalil como Gobernador de Catamarca. Resulta que este proyecto, el cual iba a generar empleo y a ser un modelo de la salud pública de la provincia hasta ahora no hizo más que no pagarle las guardias al personal de salud.
Lucas Bordon es uno de los trabajadores cuyo posteo en Facebook puso en evidencia de manera oficial el pésimo trato que recibe el personal de salud de este nosocomio. El cual no sólo no está percibiendo su salario hace ya 3 meses a pesar de trabajar , sino que también se encuentra sumamente decepcionado por el incumplimiento de las promesas que les hicieron.
El Director del Hospital Monovalente “Carlos G. Malbrán”, Dr. Daniel Godoy, brindó diferentes declaraciones a los medios en el día de hoy. Declaraciones que más allá de la presión en la que se encuentra este profesional de la salud, resultan bastante superficiales. Godoy inició diciendo que: “Hay que entender que hay cuestiones administrativas que van más allá del sentimiento de los profesionales que muchas veces escapan a los deseos que uno tiene”.
Además, argumentó la demora que fue denunciada en el posteo diciendo que “normalmente cualquier empleado de la provincia tarda 3 o 4 meses en cobrar su primer salario”. Una declaración bastante irrisoria y hasta ofensiva en este contexto. Principalmente porque la situación que vivimos no es para nada normal, y segundo porque los trabajadores de la salud son considerados esenciales en este marco de pandemia. Con lo cual no debería existir demora alguna al momento de cobrar sus salarios.
Como última justificación y utilizando a la burocracia como escudo, el Director del Hospital Malbrán dijo que: “Hubo un retraso si se quiere, que en realidad no es retraso porque se tardó un mes y medio y hoy, casualmente, fueron depositadas las guardias correspondientes”. Benditas sean esas “casualidades” que permiten a los trabajadores del Malbrán cobrar, por lo menos, sus guardias.
