Se desarrolló el IV Foro Internacional Climático en la provincia de Tucumán, con el objetivo de la realización de un debate sobre el impacto de la contaminación ambiental en la salud. El mismo tuvo lugar en los hoteles Sheraton, Catalinas Park, Club Avellaneda Central y parque 9 de Julio.
En esta oportunidad contó con más de 25.000 personas inscriptas y los asistentes se encontraron con seis conferencistas de relevancia a nivel internacional, con 40 expositores nacionales y 30 locales. En las cuatro sedes, las temáticas fueron variadas, se hablaron de ciudades y energías sustentables, salud y cambio climático, educación ambiental, buenas prácticas de la industria y eficiencia energética.
«Cuando uno trabaja en políticas públicas y aborda temas de estas características, hay que entender que estas políticas que se ponen en marcha exceden por lejos a los períodos democráticos normales de Gobierno. Son políticas de mediano y largo plazo, y eso es lo que estamos haciendo en Tucumán, comenzando a cuidar lo que tenemos», dijo Juan Manzur.
Hoy, en el segundo día, los ejes se abrieron con tres ejes, energía, sustentabilidad y recursos. «La idea de mi disertación es introducir al público en la problemática de la energía, pero desde el concepto de que se trata de una problemática de una complejidad formidable», dijo Fernando Halperín, periodista y comunicador del Instituto Argentino del Petróleo y el Gas (IAPG).
«Estamos acostumbrados a pensarla en una forma simplista y no es así, primero porque la energía en general tiene todo tipo de impactos, positivos o negativos, en la vida de las personas. Somos 7.500 millones de habitantes en parte porque hay disponibilidad de energía. Nuestro desafío como sociedad es ver cómo maximizamos los impactos positivos en todos los planos y cómo mitigamos los negativos que por la cantidad de energía que usamos tienen escala global», añadió Halperín.
«Es sorprendente la platea que hay y con mucha gente joven, lo cual es muy importante también para un trabajo de concientización que tenemos que hacer a diario para poder desarrollar cada día un mejor sistema de respeto al medioambiente y la salud», dijo Juan Pablo Ordoñez, presidente del Directorio del INVAP.
«Nuestra visión es que debemos ir a formas de energía más amigables con la naturaleza, y en ese sentido lo que se está viendo es que será necesario quemar combustible fósil durante muchas décadas más, mientras se genere algún tipo de transición hacia fuentes renovables, las cuales también están hoy en transición. La tecnología con la cual se aprovecha el viento, el sol, no es la misma que se utilizará y que será mucho más eficiente de aquí a dos, tres o cinco décadas», afirmó el periodista.
