Alberto Fernández: “La palabra ajuste está desterrada en la discusión”

El presidente de la Nación, Alberto Fernández, encabezó una reunión con los gobernadores donde se les informó sobre las negociaciones con el FMI. En este marco, advirtió que “ajustar la economía es dejar de crecer” y que para el Gobierno “la palabra ajuste está desterrada en la discusión”. Asimismo, dijo que la Argentina “va a lograr una reestructuración conveniente” de la deuda con el Fondo.

Alberto Fernández adelantó que el préstamo contraído por el gobierno de Mauricio Macri superará su mandato e incluso el de quien gobierne a partir de 2027. Además, recordó que “es muy grave” el problema de la deuda externa de la Argentina, tanto con acreedores privados como con el FMI. “Esta situación generará un fuerte condicionamiento, no solo para la actualidad, sino también para los años venideros”, reconoció.

“La solución de la deuda es una política de Estado y, como tal, debemos asumirla. Nuestro planteo no es ver cómo el Gobierno de Fernández se saca el problema de encima; sino ver cómo Argentina encuentra los mejores caminos para alcanzar la mejor solución en un escenario complejo”, agregó. “No es posible una deuda que se funde en razones de ajuste, ajustar es achicar la economía, dejar de crecer”, sentenció.

En esta línea, remarcó: “Hemos logrado este año que el déficit primario sea menor. No como consecuencia de que dejamos de pagar jubilaciones o invertir en la educación, sino producto del crecimiento. Ese es el camino virtuoso que tenemos que seguir. Si resolver el problema de la deuda es que las sociedades se posterguen y dejen de crecer, esa no se una buena solución. Esa es la lógica central de nuestro planteo”.

En otro tramo de su discurso, Alberto Fernández reafirmó su convicción de que la Argentina va a lograr una reestructuración de la deuda de US$ 44.000 millones. Sin embargo, aseguró que ese sólo será apenas “un paso adelante” en conseguir “que esas obligaciones crediticias pesen lo menos posible”. Por último, pidió ver la deuda como una secuencia y no interpretar un eventual acuerdo con el FMI como un punto definitivo.