Durante muchos años, la relación de Wanda y Zaira Nara con su papá atravesó una fuerte crisis. No obstante, con el tiempo la hermana más pequeña volvió a acercarse y retomar su vínculo con su antecesor. “Con mi viejo me pasó de decir en un momento: ‘voy a ponerme en su lugar”, expresó Zaira.
“A mí me pasaba que me molestaba verlo tan expuesto, como que a los cincuenta y pico le agarró esas ganas de mostrarse. Viste que en este medio te llaman mucho para ver si querés hacer una nota y nosotras quizás por cuestiones de tiempo o agenda la mayoría de las veces decimos que no, pero mi viejo por ahí estaba tomando un café y decía que sí”, se sinceró la modelo en el programa Podemos Hablar.
La repentina aparición de Andrés Nara en diferentes tapas de revista y programas de televisión pareció chocar a sus hijas, quienes se sintieron molestas con su comportamiento. “En un momento dije: ‘¿Por qué me jode tanto si yo laburo de esto? Yo nunca dejé de hablarle, pero sí me molestaba verlo sentado en un programa”, relataba Nara.
“Al final lo terminé entendiendo porque si este es mi laburo y a mí me encanta y me apasiona, ¿por qué a él no puede apasionarlo también?”, consideró la presentadora argentina. “Él también me podría haber dicho, ‘yo no quiero que seas famosa’, y era mi papá”, agregó.
“En ese caso seguro que yo le hubiera respondido que era mayor de edad. Entonces, en algún punto, él también puede hacer lo que quiera”, razonaba la Zaira Nara. Andy Kusnetzoff le preguntó si su hermana también había llegado a la misma conclusión que ella, pero la respuesta fue negativa.
“No, imposible. No llegó a ponerse en ese lugar, pero bueno… cada uno tiene su propia personalidad. Yo le dije a ella: ‘ponete en su lugar’, porque es llamativo todo esto: que te traten como un rey, llegar y que te hagan fotos, pero con ella había un montón de cosas extra”, finalizó la conductora, dejando claro que la situación a día de hoy sí ha mejorado.
