Este viernes 14 de mayo Naim Vera recibió la condena de prisión perpetua por el femicidio de Brenda Micaela Gordillo, que tuvo lugar el pasado 1 de marzo del 2020. La sentencia fue emitida por la Cámara Penal 1 por “homicidio doblemente agravado por mediar una relación de pareja y femicidio”. Luego de 14 meses de perpetuado el hecho que movilizo a toda la sociedad catamarqueña, pudo hacerse justicia.
La decisión por parte del tribunal integrado por Fernando Esteban, Mauricio Navarro Foressi y Carlos Moreno, fue unánime. En el día de ayer se habían leído los alegatos y se esperaba que se dicte condena, pero las autoridades decidieron pasar a un cuarto intermedio. Por lo tanto hoy pudo conocerse el veredicto luego de que el acusado y único implicado diera sus últimas palabras.
“Quiero reiterar mis más sinceras disculpas a Brenda, a su familia y a toda la sociedad por este aberrante hecho que cometí”, dijo Naim Vera. Durante el debate oral el abogado defensor intento que el acusado no recibiera una condena con agravantes. Para ello insistió en que no había relación entre los jóvenes, cosa que fue demostrada y dio pie a la condena.
A las afueras del recinto, como en todo el proceso, se encontró una gran multitud acompañando el pedido de justicia por el femicidio de Brenda Micaela Gordillo. Cabe destacar que este caso llego a tener relevancia a nivel nacional y hoy el resultado es realmente alentador. Desde diferentes sectores se ha destacado que este resultado es ejemplar y marca el camino de las respuestas que espera la sociedad de la Justicia.
Detalles de la condena a Naim Vera
Naim Vera deberá enfrentar una condena de prisión perpetua por “homicidio doblemente agravado por mediar una relación de pareja y femicidio”. Según se ha precisado hay más de 10 condenados bajo esta misma medida. Esto significa que no gozará de beneficios tales como salidas transitorias o libertad condicional hasta por casi 50 años. Cabe destacar que la condena no ha quedado fija y que podría presentarse una apelación por parte de la defensa.
