A pesar que el gobernador Raúl Jalil mencionó la posibilidad de que arribara Alberto Fernández a la provincia, el Presidente de la Nación descartó totalmente una visita a Catamarca. El motivo de la decisión presidencial es estrictamente política en el marco de la emergencia sanitaria nacional por el CV-19: Alberno no vendrá a la provincia para cuidar el Caso Cero. Catamarca no tiene el virus y si por casualidad llegara a aparecer un caso luego de su visita, su imagen se vería terriblemente afectada.
El costado político de la pandemia es inevitable. Mientras Catamarca mantenga el Caso Cero, Alberto Fernández no va a aparecer por Catamarca. Ya el Presidente tiene suficiente con las críticas que recibió por el movimiento que genera junto con la comitiva que lo acompaña en cada provincia que visita, para los médicos y el personal de salud esa concentración de gente atenta contra las medidas preventivas para contrarrestar el avance del CV-19 en el país.
Así que, si bien lo tiran como una posibilidad, los cierto es que Alberto no tiene previsto pisar la tierra catamarqueña. Entre otras cosas porque tampoco tiene grandes obras para inaugurar, solo el milagro del Caso Cero de la Virgen del Valle que podría romperse si se tienta al diablo. Los asesores del Presidente le advirtieron que si por casualidad se ataran ambos acontecimientos (el arribo de AF y el primer caso de CV-19), podría ser señalado como el “culpable” o “responsable”.
Nadie para compartir
El gobernador Jalil ansía la compañía del Presidente atento a que tener una provincia sin casos de coronavirus y no tener con quien compartirlo es frustrante. No es lo mismo que la videoconferencia o las llamadas por teléfono. Si cambiara de opinión Alberto podría ser un gravísimo error con costos políticos muy altos. En otras palabras, Jalil necesita políticamente de la visita de Alberto pero tampoco es el momento políticamente para Alberto.
Por Juan Carlos Andrada
Especial para ElAconquija.com