La economía es el factor más perjudicado por la pandemia a nivel mundial. Y dentro de ella, quienes más resienten la situación son los barrios vulnerables, donde los recursos escasean. En la capital del país el coronavirus hace estragos, el hacinamiento y la imposibilidad de parar con el trabajo para conseguir alimento, complican la situación. Previendo esta situación y para colaborar con las economías más endebles, La Caja Popular de Ahorro acopió 160 toneladas de alimentos no perecederos.
La bondadosa donación será gestionada por el Ministerio de Desarrollo Social de la Provincia. Ellos deben asegurar que los alimentos lleguen a los centros de protección alimentaria. La entrega se oficializó en un encuentro del que participaron el gobernador Juan Manzur, diputados y ministros. Carlos Cisneros, diputado nacional y dirigente gremial de La Bancaria; Gabriel Yedlin, ministro de Desarrollo Social; Cecilia Sánchez Blas, titular del gremio a nivel local; y José Díaz, interventor de la Caja Popular.
El gobernador resaltó lo necesaria que es la solidaridad en estos tiempos: “Es la segunda oportunidad que se hace entrega directamente al ministerio para poder ayudar en este momento tan difícil que vive el mundo y del que Tucumán no escapa”. Por ello “es necesario que el Estado llegue a todos los hogares tucumanos para que se puedan quedar en la casa y no les falte comida”.
Manzur destacó la labor de Cisneros que “trabaja en forma virtual en el Congreso de la Nación. Pero también está en el territorio, en los barrios más humildes, ayudando al Gobierno en todo lo que esté a su alcance”. También garantizó que la Caja Popular continuará la asistencia tanto tiempo como dure la cuarentena. Así lo confirman con alegría sus representantes: “La asistencia social y la cooperación permanente con todos es la finalidad para la que fue creada la Caja Popular”, explicó José Díaz, interventor de la institución.
¿A quiénes llega la donación?
“El gremio está presente en cada acto solidario que se genera desde la Caja aportando nuestro granito de arena”, expresó a su turno Sánchez Blas. Los beneficiarios serán 500 comedores escolares que entregan viandas a diarios y las más de 120 cocinas comunitarias y diversas organizaciones sociales. Así lo confirmó Yedlin cuando fue consultado sobre cómo programa de Seguridad Alimentaria de la Provincia volcará el aporte.
A parte también están vigencia los aportes del programa Argentina Contra el Hambre del Gobierno Nacional, que en Tucumán ya repartió 7.000 tarjetas. A la causa se destinan alrededor de $340 millones en compras de parte de los grupos más vulnerables. “Hay una fuerza muy grande de todos los gobiernos en función de la seguridad alimentaria”, subrayó el funcionario.
