El precandidato a concejal en estas PASO 2021, Miguel Morales, adelantó que uno de sus primeros proyectos será trabajar en un sistema de reconocimiento más justo para los empleados municipales de Andalgalá que no pierda de vista la recategorización y los años de servicio de tal forma que quienes estén por jubilarse puedan hacerlo con satisfacción y no sufrirla. Las declaraciones de Morales se hacen en el marco de una nueva discusión salarial que fracasa en la comuna andalgalense.
Para Morales, el sistema está plagado de injusticias y de burocracia que solo vuelven en desmedro del trabajador municipal raso. Cree que las leyes no pueden ir en contra la naturaleza del hombre. “Desde el Concejo Deliberante queremos favorecer al obrero, no perderlo de vista. Las leyes son la única protección de los pobres. Hay que ajustar el sistema porque la mayoría de los empleados están pasando por un momento muy crítico que se acentuó con la pandemia”.
“Todos los días nos cruzamos con empleados municipales que nos plantean lo complicado que es llegar a fin de mes porque los sueldos siguen perdiendo con relación a los precios del supermercado. Si bien la política salarial depende del Ejecutivo, desde el Poder Legislativo podemos aportar para dejar sentado por ley los aspectos que no deben dejarse de lado nunca para aliviar y hacer justicia con el trabajador”, sostuvo Morales a El Aconquija.
Si bien el dirigente peronista no hizo alusión directa al proyecto de incremento salarial para los concejales y el intendente que escandalizó a los obreros municipales, sin duda se refería eso. Expresó: “no quiero atrasar discutiendo lo que pasó, para qué perdernos en una discusión inútil, prefiero ver la forma de aportar técnica e institucionalmente para que el trabajador pueda estar un poquito mejor cada día”.
Morales es precandidato a concejal en primer término, lo acompañan Laura Cedrón y “Miguelito” Gutiérrez en una lista que es oficialista y no es oficialista. Son jóvenes peronistas que quedaron de lado por expresarse abiertamente en desacuerdo con las prioridades del Gobierno provincial, la falta de contención a los militantes y el manejo político de la pandemia. El último castigo de Lucía Corpacci y Jalil por su rebeldía fue ningunearlos en la foto de rigor del Frente de Todos. Sale foto ¡solos!.
